El Cáncer de Próstata Localizado se puede dividir en 3 grandes grupos, según el riesgo de progresión de la enfermedad, así se reconocen tumores de bajo riesgo, riesgo intermedio y alto riesgo. Cada grupo de riesgo justifica un estudio y tratamiento diferente.
Cáncer de próstata de bajo riesgo
Los pacientes de este grupo pueden recibir 4 opciones de tratamiento.
- Vigilancia activa: la vigilancia activa consiste en la observación del paciente, realizando controles con PSA y biopsias de prástatas anuales o bi-anuales. Según el resultado de estos estudios realizados durante el seguimiento de la vigilancia activa, el paciente puede mantenerse en vigilancia o pasar a tratamiento activo (cirugía, radioterapia o terapias focales). La gran ventaja de la vigilancia activa es no exponer al paciente a las posibles complicaciones de los tratamientos radicales, sin afectar su calidad de vida y con un control de la enfermedad oncológica que no lo exponga a un riesgo mayor que si fuera tratado de otra forma mas radical. Tenemos la mayor experiencia nacional en vigilancia activa y una de las mayores en Latinoamérica, fuimos pioneros de esta forma de tratamiento y llevamos ya mas de 15 años realizando vigilancia activa.
- Prostatectomía radical: la cirugía para el cáncer de próstata consiste en la extirpación de la próstata, las vesículas seminales y en determinadas situaciones los ganglios linfáticos. Esta cirugía puede realizarse por vía convencional (cirugía abierta), laparoscópica o robótica. Es importante saber que los resultados oncológicos (cura del cáncer) y funcionales (incontinencia de orina y disfunción eréctil) son similares con las 3 técnicas mencionadas y que la experiencia del cirujano es el factor que hace la diferencia en los resultados finales. Recomendar la cirugía correcta para cada paciente, sin ceder a las presiones del marketing de la industria, hablando con honestidad de los pro y los contras, es un desafío que asumimos en nuestra clínica. Una vez elegida la mejor cirugía para el paciente, nos aseguramos que un cirujano experto sea quien la realice. Ese es nuestro compromiso.
- Radioterapia: en los pacientes de bajo riesgo, la radioterapia, en cualquiera de sus modalidades (braquiterapia, radioterapia modulada o conformacionada, radioterapia guiada por imágenes, etcétera) puede ser una opción de tratamiento. En nuestra clínica, derivamos a los pacientes para que consulten con colegas radioterapeutas en Uruguay o en el extranjero, manteniendo siempre los principios de honestidad y excelencia a la hora de informar sobre los tratamientos propuestos.
- Terapias focales: en los últimos años, este tipo de tratamiento ha adquirido una proyección importante en los pacientes de este grupo. Para el asesoramiento y tratamiento de terapias focales, realizamos consultas en el extranjero, ya que no están disponibles en nuestro país.
Cáncer de próstata de riesgo intermedio o alto
Los pacientes en estos grupos son en general candidatos a tratamientos activos y en ocasiones incluso, necesitan mas de un tratamiento, es decir, pueden requerir asociar cirugía con radioterapia u hormonas.
Una valoración personalizada de estos pacientes es esencial ya que no existe “el cáncer de próstata” sino que en cada caso, el mismo tipo de tumor puede requerir tratamientos diferentes.
Realizar esta valoración personalizada, en grupos multidisciplinarios, con asesoramiento genético y exámenes de última generación es el objetivo para nuestros pacientes.